A nuestra amiga Isa la han llamado de Gas Natural para hacer la revisión de la instalación de un piso del que fue inquilina años ha. Isa les ha contestado “Es que ya no vivo allí”. Y la señorita ha preguntado: “¿Que ya no vive, o que ya no vive allí?” Evidentemente, Isa no ha sabido qué contestar. Se nos ocurre que podría haber dicho: “Que ya no vivo, pero es que justamente me ha pillado Usted saliendo de ultratumba para hacer unos recados. Es que en ultratumba el comercio cierra por la tarde, ¿sabe?”.
En cambio, ayer domingo escribimos un mail a Thermomix para que nos indicaran qué transformador necesitábamos para el aparato. Ya lo teníamos medio investigado pero queríamos asegurarnos. Esta mañana nos han contestado con un e-mail detalladísimo a la par que claro, y eso que éstos son dos atributos que no suelen ir juntos. Pues bien, en el documento no sólo se indicaba qué tipo de transformador necesitábamos (voltaje, potencia y frecuencia), sino que también se hacía una descripción que no tiene desperdicio de cómo era ese transformador. Atención:
Por este motivo, este transformador es un aparato: relativamente grande (como la mitad de una caja de zapatos), relativamente pesado (2-3 kilos), y relativamente caro (35.000 - 40.000 ptas).
Nos ha parecido magistral. Primero, lo de usar el término “aparato” para referirse al transformador (aquí se diría que los redactores se han moderado, habiendo estado tentados de escribir “trasto”). Segundo, lo de insistir en el “relativamente” para a continuación pasar a detallar exactamente cuánto. Tercero, lo de usar una caja de zapatos como unidad de medida de volumen. Diga que sí, señora, que con los centímetro cúbicos no hay quien se aclare. Y, por último, lo de remontarse a las pesetas, que deja clarísimo cuál es el público objetivo de la Thermomix: esa parte de la población que aún cuenta en pesetas. Evidentemente, nosotros hemos tenido que hacer la conversión a euros (¿Cuánto era un euro en pesetas, Pablo? Ni idea, trabajemos con la regla de que mil pelas son seis euros.) y luego a dólares. Cuánta sabiduría de andar por casa cabe en tres líneas, ohmygot.
jajajja me encanta lo de Isa, ¿usted ya no vive? ajajajja
ResponderEliminarun euro=166.nosequé pesetas, creo
y bueno, lo del transformador ha de ser tan grande como una caja de zapatos...me parece a mi que hoy en día los hacen bastante más pequeños y apañados...y bueno, ya lo de 'relativamente caro'...¿relativo a qué, Señora?
Pues Gala, el transformador (que ya tenemos, no semos aplicaos ni ná) es un trastaco que no veas. Mejor dicho, que ya verás cuando vengas. Piensa que 2000W son muchos vatios (relativamente, claro). La compra del trasto fue otra pequeña aventurilla que ya contaremos. Jul&Pol
ResponderEliminarGuapos,
ResponderEliminarLos martes por la noche con Isa miramos la tele (sí, sí!), pues hay un programa en TVE titulado "Españoles en el mundo" que tiene su gracia porque la mayoría de gente enseña su piso, dice cuánto cobra, aparece comiendo en restaurantes y esas cosas tan cotillas que nos gustan tanto (y sin tener que comprar el Lecturas)...
Pues bien, anoche nos las prometíamos muy felices con el programa dedicado a españoles en Nueva York, más que nada para ver como viven los que, como vosotros, andáis por esas calles de edificios altísimos y gente tan "ecléctica" por decirlo de alguna manera. Pues bien, el reportaje fue una decepción: todos son un pijos freaks (abundan más los segundos)!! Os copio el enlace con el video.
http://www.rtve.es/mediateca/videos/20091215/espanoles-mundo--nueva-york/650404.shtml
Un beso. (Jesús)
hola, llegué a vuestro blog por casualidad y me quedé como una fiel lectora de vuestras aventuras al otro lado del charco. me alegro que las cosas os vayan tan bien, espero que siga todo igual y que disfruteis de la navidad en NY que dicen es maravillosa. por cierto, vi los cortos de Pablo y son maravillosos, aunque mi favorito es el del aniversario, buena actuación Julia!
ResponderEliminarUn saludo!